chef mis recetas

Ponemos una cazuela amplia con agua abundante a calentar y añadimos un puñadito de sal, cociendo la pasta según las indicaciones del fabricante. Podéis utilizar espaguetis, tallarines o cualquier pasta larga que os guste.

Quitamos un minuto a las indicaciones del paquete, para dejar un poco al dente la pasta ya que luego la vamos a terminar salteándola en la salsa que haremos con la mantequilla y las hojas de salvia fresca.

Mientras se cuecen los espaguetis, lavamos y secamos bien las hojas de salvia y las picamos en tres trozos. En una sartén con buena capacidad, ponemos la mantequilla y esperamos a que se derrita y empiece a espumar. Añadimos las hojas de salvia y las rehogamos ligeramente durante un par de minutos, disfrutando con su aroma.

Escurrimos bien los espaguetis ya cocidos, los añadimos a la sartén y salteamos dando unos movimientos envolventes para que la salsa de mantequilla y salvia impregne bien toda la pasta. Sazonamos con pimienta negra y cubrimos con queso rallado, a ser posible Parmesano Riggiano o Pecorino romano, sirviendo inmediatamente.